16 junio, 2007

Justicia para Troxel


Hola: ya es conocido para nosotros, los ciclistas chilenos, el caso del trialero Alejandro Inostrosa “Troxel”. Este ciclista muere a palos, como un perro en la plaza Pedro de Valdivia, a manos de otro joven, Aaron Vasquez hijo de un famoso y acaudalado pastor evangélico.
La razón de la muerte es estúpida, no hay riña, no hay provocación, no hay nada. Simplemente el hermano de Vasquez se siente ofendido por un supuesto desprecio por parte de otro ciclista quien “no le dio un cigarro”. Este llama por teléfono al asesino, quien sale de su casa con un bate de béisbol en la mano, llega a la plaza de los hechos y arremete contra un grupo de ciclistas gritando: “así que nos querías humillar tal por cual…” y mata a Troxel terriblemente.

Estos hechos me ponen la piel de gallina. ¿Quién no ha tenido un encontronazo con alguien en la calle? No siempre hay buenos modales y los ciclistas somos mal mirados por mucha gente (como los taxistas, choferes, automovilistas, peatones, etc.) creen que somos unos locos, ociosos, chiflados y estorbo en la calle.

Las personas en general se han vuelto muy mal educadas. Al menor conflicto se responde con violencia, el garabato, te sacan la madre, te encierran con los autos, incluso golpes, en este caso la muerte. Cuando no hay dialogo, la violencia se toma las calles. Es una tragedia de la racionalidad, las personas se transforman en animales.

Por ello, nosotros ciclistas obesos o no, debemos dar el ejemplo y poner calma en los momentos difíciles. La cleta es cultura. Mente sana en cuerpo sano. No respondamos con violencia, si no sufrimos algún daño físico no respondamos. Violencia trae violencia y como la guerra, se sabe como comienza pero no como termina.
Este es uno de los objetivos del Ciclismo Obeso, cambiar la mentalidad de la COMPETENCIA POR EL COMPARTIR. Somos gorditos, no podemos competir, pero podemos compartir con otros ciclistas, opinar y soñar por un lindo deporte.

Por TV nos muestran como avanza este proceso penal. Ya se acerca el veredicto y esperamos justicia. Muchos años de castigo, porque no puede haber impunidad. Si se condena al asesino en un régimen de libertad, será una derrota. La violencia gratuita no puede quedar impune.
Vi la entrevista en TVN y el joven asesino no parece muy arrepentido. Muchos años de cárcel es el único medio para que el asesino tome conciencia de sus hechos. Su familia, gracias a sus influencias, lo ha protegido. Perentoriamente debe aprender él y todos, que no somos Dios, somos seres frágiles que merecen el mayor respeto.

Justicia para Troxel y para las personas de bien, que viaje o no en bicicleta.

No hay comentarios.: